Cuando uno piensa en los lunes, la mayoría de las veces, se deprime. Los lunes definitivamente son difíciles. Uno arranca la semana, y tiene una perspectiva de todo lo que vendrá. Si lo arrancas dormido, posiblemente toda la semana te cueste, si lo arrancas con energía, posiblemente sea una buena semana, marca tendencia. En este marco, el lunes a las 14 horas, arrancamos con la primera jornada en el sótano definitivo.
Francisco Posse (Productor Ejecutivo) junto a Daniela Mendolicchio (Jefa de Producción)
Mariana (Asistente de Arte) mirando la escena 25
Mariana (Asistente de Arte) mirando la escena 25
La cara de los chicos, era normal, mi miedo era como iban a responder un lunes. Si, suena raro no?, una película independiente que se graba un lunes no feriado suena raro, pero sucedió, un lunes estábamos todos en un sótano gravando la escena 25.
Todos mirando como quedaba el plano con la grua
Durante la escena 25
Alejandra Garagnani (Mquillaje) junto a Iride Mockert (Actriz)
El tema era claro, el plan de rodaje ajustado, quedan 3 semanas muy intensas, tal vez súper intensas. A partir de ese lunes las jornadas eran casi consecutivas.
Como siempre las áreas se dividieron y empezaron a trabajar. Ahí pude posar mi vista en un área particular, sonido.
Como siempre las áreas se dividieron y empezaron a trabajar. Ahí pude posar mi vista en un área particular, sonido.
Con un cajón de gaseosa y una madera blanca se armo una mesa en el único lugar del sótano donde nunca aparecía frente a cámara. Sonido, alias Pato, era el único área que venia probando asistentes y que siempre por algún motivo terminaban abandonando.
Pato, con toda la paciencia del mundo, armó una caña de sonido, que era prácticamente un insulto. A la caña la forró con goma espuma y a su vez la goma espuma la pegó con la cinta de papel, lo cual y perdonen la obviedad a la hora de hacer un chiste era un papelón. Siempre me sorprendió la meticulosidad con la que armaba sus equipos.
La computadora, la placa capturadota, la prueba de cables, la puesta a punto del programa con el que capturaba sonido, y sus auriculares. Pronto, Ale me saco de la concertación, ya estaba todo listo. Ahí tire acción, y fue una tarde increíble.
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